Pastor López conocido en el mundo de la música como ‘El Indio’ se ve
tranquilo, sin aspavientos. Atiende al que llega, sin tanto preámbulo.
Aunque el pie fracturado se le ha convertido en un freno para actuar en
tarima no ha dejado de cumplir los compromisos adquiridos en noviembre.
Lo hace sentado. La última presentación fue el 28 de enero, al cierre
de las Ferias de San Sebastián en San Cristóbal, Venezuela.
La silla la alterna con la hamaca y desde allí contempla el corral donde
tiene encerradas gallinas, pavos y patos. Ese es el espacio que ha
creado para pasar días de descanso en esa casa finca, al lado de su
último hijo de tres años. El resto de tiempo la pasa de gira.
Por Colombia se pasea como si fuera Venezuela. Se siente de allá y de
acá. Su curiosidad por este país empezó desde muy temprano. Quiso
conocerlo porque le llamó la atención su largo nombre. Lo inspiró en sus
canciones sin conocerlo. Y no fue precisamente por Cúcuta por donde
entró sino por Barranquilla, en 1972. Su correría prosiguió por Bogotá,
Medellín, Pereira, y de cada región se fue enamorando y en algunas
compró casa para acampar. Aunque aclara que ha vivido más en Colombia
que en Venezuela. ‘Venezuela me vio nacer y Colombia me vio crecer. Todo
lo que tengo se lo debo a este país’.
A su alrededor suenan los teléfonos celulares, pero se declara enemigo
de la tecnología. Los contratos para conciertos los deja en manos de su
manager Jesús ‘Chucho’ Zambrano.
COMPOSITOR Y CANTANTE
Su vida musical se remonta a 1955 cuando compuso su primera canción.
Tenía sólo 12 años y el trío puertorriqueño ‘Los tres reyes’ le grabó:
No seas mentirosa mujer porqué me engañaste. Dijiste que me amabas y me
traicionaste, pero eso no me importa ya te sabré olvidar. He jurado
ante Dios no volverte a buscar. Tú no lloras ahorita porque estás junto
a él, pero cuando regreses tú pensarás volver, pero ya será tarde y
nunca encontrarás lo que una vez dejaste sin necesidad.
En 1967 grabó ‘La venezolana’. Se unió al combo de Nelson Henríquez y
de ahí pasó a la agrupación de Aníbal Velásquez y a Los Mayorales y el
combo de Emir Boscán. En 1973 se abrió con su combo y fue subiendo como
la espuma de la cerveza.
Su vida es, fue y seguirá siendo la música. Incluso los estudios de
secundaria los truncó porque en el colegio lo pusieron a escoger y se
quedó cantando. De las innumerables canciones (no todas son de su
autoría) le gusta abrir los toques con el Indio y cerrar con La cumbia.
Jocosamente dice que la vena artística no la heredó de su papá Máximo
Pineda porque ‘silvaba y se equivocaba. Aplaudía y se perdía’. Tampoco
de su mamá Zoila Rosa López, quien no ejecutaba, pero al menos
fabricaba instrumentos: guitarra, cuatro, violines y mandolinas. Como
nació entre esos ‘juguetes’ aprendió a tocar maracas a los tres años,
el cuatro a los cinco años y cantó música llanera a los siete.
La mayoría de sus siete hermanos son cantantes. Candelario, Agustina,
María Lourdes, José Rafael, Orlando y Marina. Los dos menores han muerto
y en ese orden le tocaría a él, y pasó tremendo susto a finales de 2010
con un infarto, pero ‘Dios quiere que siga cantando’.
¿INDIO?
El apodo de ‘El Indio’ se lo pusieron en Barranquilla en 1972. De hecho
‘soy indio. Mi papá desciende de la etnia Gallones, de Barquisimeto,
Venezuela’. Allí nació y a los cinco años se lo llevaron para Caracas. Y
fue en la capital de Venezuela donde armó un grupo con Calendario que
llamó: Los hermanos López. Interpretaba música campesina. En los años 60
grabó el tema ‘Pájaro amarillo’ y ahora se da golpe de pecho diciendo
que fue primero que ‘Los Serranitos’, que ‘Alegres parranderos’, que
‘Los hijos de doña Carmen’. El estilo campesino lo dejó a un lado para
dar paso a la música tropical, a la cumbia, al paseíto, al porro y paseo
vallenato.
A los 27 años se vino para Maracaibo y se integra al combo de su
compatriota Nelson Henríquez, con quien trabajó año y medio. Después
pasó a formar parte de la agrupación de Aníbal Velásquez y a Los
Mayorales y el combo de Emir Boscán. Le dio vida a su propia agrupación
y se subió como la espuma de la cerveza.
Maracaibo es su sede, pero se la pasa de gira por el exterior, entre
ellos Colombia. Cumplió 50 años de vida artística y el 15 de junio, 68
años de nacido. No se resiste a la quietud y dice que hay indio
Pastor
para rato.
Lisandro Meza y Alfredo Gutiérrez, quienes admira, le preguntan: ¿hasta
cuándo vas a pagar tu disco? Y él les responde siempre: no lo sé. ¿Y
cuándo te piensas retirar? ‘Cuando te mueras tú’.
Piensa que el éxito de sus canciones radica en las letras, en los
mensajes que llevan intrínsecos. Alguien le preguntó que si había tenido
problemas amorosos, pero no. Su corazón está abierto al amor. Incluso
muchas de sus éxitos son composiciones ajenas. Por ejemplo ‘El reo
ausente’, ‘Traicionera’ y ‘El hijo ausente’ las compuso el peruano
Manuel Mantilla. ‘De rodillas’ lo convirtió en bailable y ha sido un
éxito.
LA METAMORFOSIS
Pastor López ha vivido todas las etapas de la producción de un disco.
Recuerda que grabó 45, LP y ahora Disco Compacto. ‘Cuando empecé a
grabar lo hacía en dos canales. Ahí el que se equivocaba perdía.
Teníamos que repetir todo. En un canal estaba las trompetas, timbal, y
en el otro, yo. Era en directo y en un solo día. No es como ahora, que
usan la computadora y si se desafinan lo acomodan, pero cuando les toca
actuar en vivo no es igual. Lo mío es natural. Y el público me pregunta:
¿estás doblando? Para demostrarles que es en vivo les mando un
saludo’.
‘NO SOY CHAVISTA’
Aclaró que no es de la oposición venezolana, ni chavista. Simplemente es artista y se debe a todo público.
‘Chávez es mi amigo personal. No tengo problemas con los políticos, soy apolítico. Le canto a todos’.
Sin embargo, con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, se
siente agradecido porque se apersonó, por medio del embajador de
Venezuela en Colombia, de su operación del corazón en la clínica Shaio
de Bogotá. ‘Él fue quien pagó la cuenta en la clínica Shaio. Por eso
todos los días le pido a Dios que se salve, así no vuelve a la
presidencia, pero que siga vivo. Muchos me preguntan: ¿Tú eres chavista?
No, yo soy artista. La mayoría de veces no voto porque casi siempre
estoy cantando’.
AGENDA APRETADA
A pesar de la avalancha de músicos jóvenes El Indio
Pastor López se
sigue imponiendo. No tiene en el repertorio tema nuevo y así tuviera de
su autoría el público siempre le pide los mismos: ‘Golpe con golpe’,
‘Las caleñas’, ‘Traicionera’, ‘Adiós amor’,’ El ausente’, ‘El eco de tu
adiós’, ‘Pereira’, ‘Lágrimas del alma’, ‘Regálame una rosa’, ‘Solo un
cigarro’…
La gira este año empezó y le ha tocado cantar sentado. En la agenda de
febrero tiene programado conciertos en Maturín, Puerto Ordaz, Ciudad
Bolívar, Venezuela. En Roldanillo, Valle; y Medellín, entre otros.
PASTOR FUE UNA PROMESA
Su mamá Zoila Rosa López lo bautizó José
Pastor porque le hizo esa
promesa a la Divina Pastora, patrona de Barquisimeto. Nació con tifus y
su mamá se aferró a la Divina Pastora para que se salvara.
Entonces él adoptó, más adelante, el apellido de su mamá y también
descartó el José.
Pastor López era más sonoro para el naciente artista
que cumplió 51 años de vida artística. López es el apellido de su mamá.
Pineda, el del papá, pero ‘no me gustó y lo rechacé’. En conclusión,
Pastor sí es indio, pero su primer apellido es Pineda y no López.